Uno de cada cinco licenciados menor de 30 años no encuentra trabajo (uno de cada tres, en los menores de 24). Ningún tipo de trabajo. El 3,7% de los doctores, tampoco. Para los menos formados, la cosa pinta mucho peor. Quienes se quedaron en la ESO sufren ahora un paro del 52%, que se dice pronto (62% si acotamos a los menores de 25). El riesgo de que muchos queden excluidos del mercado laboral es real. "Ese es el problema", dice un experto del Ministerio de Trabajo. "La mayoría dejó de estudiar durante los años de crecimiento para emplearse en la construcción. Trabajando a destajo ganaron sus buenas pesetas, y hace mucho que se fueron del sistema educativo sin ninguna preparación".
EL PAÍS, domingo 19 de septiembre de 2010
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