La apatía se ha instalado en mi trabajo, demasiada mecanización, hace tiempo que ando a la búsqueda de una idea para cambiar, quiero tener la inspiración para lograr más diversión. Necesito contacto directo con el cliente, que haya más piel con piel, sentirlo cerca de mí, notarlo entre mis brazos, ver como se mueve debajo de mi, quiero escuchar sus gritos, sus gemidos, no puede ser todo un aquí te pillo, aquí te mato.
A partir de hoy todos los trabajos como asesino a sueldo los realizaré directamente con mis manos, mataré al personal estrangulándolo.
Javier Puchades, Trabajos manuales.