H. G. Wells: “History is a race between education and catastrophe”.

martes, 5 de junio de 2012

2º CC.SS. - TEMA 11 - La historia de Ricote, el morisco



Bien sabes como el pregón y bando que Su Majestad mandó publicar contra los de mi nación puso terror y espanto en todos nosotros; a lo menos, en mí le puso de suerte que me parece que antes del tiempo que se nos concedía para que hiciésemos ausencia de España, ya tenía el rigor de la pena ejecutado en mi persona y en la de mis hijos. Ordené, pues, a mi parecer como prudente, bien así como el que sabe que para tal tiempo le han de quitar la casa donde vive y se provee de otra donde mudarse; ordené, digo, de salir yo solo, sin mi familia, de mi pueblo, y ir a buscar donde llevarla con comodidad y sin la priesa con que los demás salieron; porque bien vi, y vieron todos nuestros ancianos, que aquellos pregones no eran sólo amenazas, como algunos decían, sino verdaderas leyes, que se habían de poner en ejecución a su determinado tiempo; y forzábame a creer esta verdad saber yo los ruines y disparatados intentos que los nuestros tenían, y tales, que me parece que fue inspiración divina la que movió a Su Majestad a poner en efecto tan gallarda resolución, no porque todos fuésemos culpados, que algunos había cristianos firmes y verdaderos; pero eran tan pocos que no se podían oponer a los que no lo eran, y no era bien criar la sierpe en el seno, teniendo los enemigos dentro de casa. Finalmente, con justa razón fuimos castigados con la pena del destierro, blanda y suave al parecer de algunos, pero al nuestro, la más terrible que se nos podía dar. Doquiera que estamos lloramos por España, que, en fin, nacimos en ella y es nuestra patria natural; en ninguna parte hallamos el acogimiento que nuestra desventura desea, y en Berbería, y en todas las partes de África, donde esperábamos ser recebidos, acogidos y regalados, allí es donde más nos ofenden y maltratan. No hemos conocido el bien hasta que le hemos perdido; y es el deseo tan grande, que casi todos tenemos de volver a España, que los más de aquellos, y son muchos, que saben la lengua como yo, se vuelven a ella, y dejan allá sus mujeres y sus hijos desamparados: tanto es el amor que la tienen; y agora conozco y experimento lo que suele decirse: que es dulce el amor de la patria.

Miguel de CERVANTES, Don Quijote, Libro II, Capítulo LIV.


Los moriscos, candidatos al Premio Príncipe de Asturias de la Concordia
En 2010, se presentó la candidatura al Premio Príncipe de Asturias de la Concordia de los descendientes de los moriscos españoles. Apoyaron la propuesta un grupo de intelectuales y creadores entre los que se encontraban expertos internacionales en la historia de los moriscos como Bernard Vincent, de La Sorbona de París, o el catedrático emérito de Harvard Francisco Márquez Villanueva, la directora de cine Izza Génini, el Nobel portugués José Saramago, el escritor libanés Amin Maalouf, autor de la novela León el Africano, que cuenta la vida de un morisco granadino del siglo XVI, y los filósofos Sami Naïr (francés) y Reyes Mate (español), el catedrático Federico Mayor Zaragoza, y el escritor Juan Goytisolo, además de más de 1.500 periodistas, actores, políticos y, en definitiva, ciudadanos de todas las creencias e ideologías.