El término marrano hace referencia a los judíos convertidos al cristianismo y que siguieron observando clandestinamente su religión. La palabra marrano procede del árabe muḥarram ('cosa prohibida'), que designaba, entre otras muchas cosas, al cerdo, cuya carne está prohibida para los musulmanes. En romance, esta palabra se utilizó desde el siglo X para referirse a este animal. A partir del siglo XIII, comenzó a utilizarse de forma hiriente para designar a los judíos conversos, quizá porque estos seguían conservando sus creencias y costumbres y, entre ellas, la de no comer carne de cerdo.
En el primer párrafo del Quijote se dice que Alonso Quijano comía los sábados "duelos y quebrantos", una fritura de huevos y tocino . Algunos estudiosos consideran que el protagonista de la novela de Cervantes era judío, pues éstos, precisamente para demostrar que su conversión había sido verdadera, comían carne de cerdo.
En el primer párrafo del Quijote se dice que Alonso Quijano comía los sábados "duelos y quebrantos", una fritura de huevos y tocino . Algunos estudiosos consideran que el protagonista de la novela de Cervantes era judío, pues éstos, precisamente para demostrar que su conversión había sido verdadera, comían carne de cerdo.